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En este momento, más del 20% de los casos de COVID-19 en los Estados Unidos son niños. Si bien algunos niños que se infectan nunca muestran signos o síntomas de la enfermedad, en el último año aquí han muerto más niños por COVID-19 que por otras enfermedades contra las que tenían vacunas disponibles, como la gripe o la varicela.
Ahora que la vacuna Pfizer está disponible para niños de 12 años en adelante, alentamos a los padres a evaluar todas las posibles situaciones cuando traten de tomar la decisión de que su hijo se vacune contra el COVID-19, además de considerar los riesgos asociados con la infección, en comparación con la seguridad y eficacia de la vacuna.
El riesgo de COVID-19 en niños
Dado que hemos estado en pandemia durante más de un año, ahora sabemos que, en general, los niños se enferman menos por COVID-19 en comparación con los adultos mayores. Sin embargo, esto no significa que algunos niños que se infectan no estén en riesgo.
Muchos niños que contraen COVID-19 están siendo hospitalizados por sus síntomas y, según la American Academy of Pediatrics, han muerto más de 340 niños. También existe un riesgo cada vez mayor de un trastorno relacionado con el COVID-19 denominado síndrome inflamatorio multisistémico en los niños, que puede afectar el corazón junto con otros órganos.
La investigación ha demostrado que las vacunas contra el COVID-19 son muy efectivas para evitar que las personas contraigan COVID-19 y prevenir enfermedades graves en quienes se infectan. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) afirman que la vacuna también puede ayudar a prevenir que los niños transmitan la enfermedad a otras personas.
La vacuna contra el COVID-19 es segura y eficaz para los niños
Se realizaron extensos ensayos clínicos con miles de participantes, incluidos niños mayores de 12 años, para evaluar la vacuna contra el COVID-19 y generar datos científicos y otra información para que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) pueda determinar su seguridad y eficacia.
En marzo, comenzó el estudio que condujo a la autorización de uso de emergencia (EUA) de la vacuna Pfizer para niños. En el estudio participaron más de 2,000 niños de 12 a 15 años. De todos los participantes que recibieron la vacuna, ninguno de los niños se enfermó de COVID-19. Esto significa que, en el estudio, la vacuna funcionó incluso mejor en niños que en adultos.
Tu hijo puede tener efectos secundarios
Es importante que sepas que tu hijo no puede contraer COVID-19 por vacunarse. Sin embargo, los niños pueden tener efectos secundarios y no sentirse bien durante unos días, pero eso es una señal de que su organismo está generando defensas contra el COVID-19.
Los niños han informado los mismos efectos secundarios que los adultos después de recibir la segunda dosis de la vacuna Pfizer. Efectos secundarios comunes:
- Escalofríos.
- Fiebre
- Dolor de cabeza
- Dolor muscular
- Náusea
- Dolor, enrojecimiento o hinchazón en el brazo donde se colocó la inyección
- Fatiga
Para aliviar el dolor en el brazo, aplica un paño húmedo y frío en la zona. Para ayudar a aliviar las molestias por la fiebre, dales más líquido y ponles ropa liviana. Además, los CDC permiten el uso de medicamentos de venta libre para aliviar el malestar después de la vacuna, pero el niño no debe tomarlos antes de vacunarse.
¿Cómo puede mi hijo recibir una vacuna contra el COVID-19?
Muchos departamentos de salud de los condados del área están ofreciendo vacunas a los mayores de 12 años. Quienes deseen recibir un aviso cuando AdventHealth tenga un evento de vacunación comunitario pueden visitar CoronavirusVaccineAlerts.com. Para obtener más información sobre la vacuna contra el coronavirus de nuestros expertos médicos, visita nuestro Centro de Recursos sobre Vacunas contra el Coronavirus.